La terraza del Oso

Lleno de vegetación, como si se tratara de un paisaje asturiano, encontramos este restaurante situado a las puertas de la zona residencial de La Moraleja. En este marco se ha instalado una terraza para 80 comensales, donde acuden ejecutivos, en su mayoría. Por la noche, el desfile de gente guapa que cena en las zonas donde el techo no es más que el cielo estrellado. Y sobre la mesa, una cocina de aires asturianos. Los bocados estrella: el pixin de barriga negra, el chuletón y algunos platines en pequeños cuencos.